Guerra judicial por “la fregona”

Imagen

La fregona, de Manuel Jalón, fue un invento revolucionario (patentada en 1964), ya que cambió la forma de limpiar en los hogares españoles, pasando de limpiar el suelo de rodillas, a fregar de pie. La fregona de Manuel triunfó comercialmente por su sofisticada sencillez, por sus enormes beneficios de uso y por su precio asequible para la pujante clase media española. Es decir, tenía la combinación perfecta para convertirse en un producto de gran éxito comercial. Y así fue.

Pero por desgracia en todos los inventos revolucionarios, surgen competidores y los más peligrosos son los más cercanos. Un antiguo colaborador y socio de Manuel Jalón, han venido afirmando de forma reiterada en medios de comunicación y apariciones públicas que su familiar,  Emilio Bellvis,de hecho le concedieron un modelo de utilidad de escurridor de la fregona ya que intentó que fuera patente pero la rechazaron por similitudes a la de Jalón.

Tras una intensa batalla judicial que ha durado años, los herederos del inventor han logrado que la Justicia obligue a otra familia, la de Emilio Bellvis, a dejar de atribuir públicamente a este último el invento.

El punto de inflexión en esta polémica lo marcó la sentencia firme del 1 de abril de 2009 de la Audiencia Provincial de Zaragoza, que despejó toda duda sobre quién era el inventor, Manuel Jalón, mediante una acción de jactancia –un procedimiento poco habitual por el cual una persona que se siente agraviada reta al que le perturba a que demuestre ante un juez la veracidad de lo que dice o, por el contrario, calle para siempre–.

Pese a haber quedado aclarado este extremo, la familia de Manuel Jalón tuvo que volver a los tribunales para exigir que se ejecutara la sentencia, ya que la familia Bellvis insistía en atribuirse el invento. También aquí lograron un nuevo éxito judicial, pues se les condenó a pagar 18.000 euros por daños y perjuicios por no cumplir con lo que dictaba la sentencia. Pero la senda judicial no culminó ahí. Ante la aparición de nuevas declaraciones de familiares de Bellvis, los herederos de Jalón abrieron una nueva vía, reivindicando el derecho al honor profesional del patriarca.

En este sentido, un juzgado de Zaragoza les condenó a pagar otros 18.000 euros de indemnización por derecho al honor, una cifra que ha sido ampliada recientemente a 21.000 euros por la Audiencia Provincial (sentencia del 17 de abril), en respuesta a todas las declaraciones públicas que se habían producido tras la sentencia firme que determinó la autoría del invento.

La Justicia Española entiende que con las declaraciones públicas de la familia Bellvis “se ha producido un evidente menosprecio al honor profesional de Manuel Jalón, poniendo en duda, o negando incluso, su autoría en el invento, produciendo un desmerecimiento en su trayectoria”.

Culmina así, en 2013, una ardua batalla judicial, la que ha librado durante años la familia del ya fallecido Manuel Jalón, desde que en 2007 el propio inventor, ya fallecido, interpuso por primera vez una acción de jactancia ante un juzgado de lo mercantil.

Fuentes: Expansión.com y http://www.fregona.es/patentes.html

Rocío A.M.

Perito Judicial en Piratería Intelectual e Industrial

Entradas similares de luchas eternas, como dice el refrán: “el tiempo pone a todo el mundo en su lugar”:

La lucha de cuba vs EEUU zanjada con un puro: “Cohiba”

El inventor de la máquina del tiempo